Las entregas de productos de gran consumo siguen evolucionando. Uno de los aspectos más demandados en esta época del año es el servicio de entrega en barcos y yates. Nuevos operadores se lanzan a por este objetivo conscientes del creciente interés del consumidor.
Uno de ellos es la compañía gallega especializada en drones Aerocamaras, que ha estrenado su servicio Drone to Yacht. De la mano de la empresa de asesoramiento y gestión de infraestructuras portuarias Global Equity Infrastructures Corporation (GEIC), la compañía iniciará en agosto este servicio premium de reparto de comida.
Su funcionamiento es sencillo: un usuario selecciona desde su yate qué quiere comer, realiza el pedido a través de la app o la web de Drone To Yacht a un restaurante en concreto, y a partir de ahí ya solo tiene que esperar a que su comida llegue, literalmente, volando.
La iniciativa comenzará a operar el 1 de agosto en algunas de las zonas con gran volumen de embarcaciones de recreo con clientes potenciales e Ibiza ha sido la isla seleccionada para encabezar el proyecto. Aerocamaras ya ha llegado a un acuerdo con varios restaurantes y marinas de la zona (y trabaja para ampliar la lista de franquiciados).
Drone To Yacht se aprovecha de un dron eléctrico que la compañía gallega ha desarrollado para hacer envíos de cortas distancias que ofrece un servicio rápido y silencioso. La aeronave no tripulada cuenta con una velocidad máxima de 32 nudos junto con un sistema de carga y suelta con un carrete de 20 metros.
Pero la compañía no quiere limitar el servicio a comidas. De cara al futuro, prevé que se pueda solicitar a través de la app productos de gran consumo como cremas solares, gafas de sol o incluso medicamentos y material de urgencia.
El objetivo de la compañía es expandirse por el resto de enclaves de las costas españolas en los próximos meses y planea desembarcar en diversos puertos italianos. Además, también disfrutarán de la comida aerotransportada por drones españoles en el Caribe, donde la alianza empresarial comenzará a operar a lo largo de este año, tras la temporada de huracanes que suelen azotar las aguas caribeñas hasta octubre.